Guía sobre el balance de una paleta de pádel
El balance es cómo se distribuye el peso a lo largo de la paleta. En otras palabras, indica si la paleta se siente más pesada hacia la cabeza o más cerca del puño.
Principalmente, el balance impacta en dos aspectos fundamentales del juego:
• La potencia que podés imprimirle a la pelota.
• La facilidad para mover la paleta.
Para explicarlo mejor, pensemos en cómo se usa un martillo para clavar un clavo:
Si agarrás el martillo desde la cabeza, es fácil moverlo, porque el peso está en tu mano. Pero al momento de clavar, no tenés fuerza suficiente.
En cambio, si lo agarrás desde el mango, cuesta un poco más moverlo, pero al golpear hacés mucha más fuerza, gracias al efecto palanca.
Con las paletas de pádel pasa algo similar. El balance actúa como ese punto de agarre del martillo: más peso en la cabeza = más potencia; más peso cerca del puño = más control y facilidad de movimiento.
Hay dos factores principales:
La forma de la paleta:
Las de forma diamante suelen tener el peso más arriba (balance alto). Las redondas, más cerca del puño (balance bajo).
Los materiales:
Gomas más densas y compuestas más pesadas (como carbono) tienden a generar un balance más hacia la cabeza.
Medir el balance de una paleta es bastante sencillo y podés hacerlo con elementos que tenés en casa. Solo necesitás una mesa (o una superficie plana) y una regla o cinta métrica.
Pasos para medirlo:
1. Apoyá la paleta sobre una mesa, dejando el mango completamente sobre la superficie y dejando que la cabeza quede afuera, “colgando” en el aire.
2. Deslizá la paleta hacia afuera lentamente, hasta encontrar el punto exacto donde empieza a inclinarse o se cae. Ese es su punto de equilibrio.
3. Medí la distancia desde el borde de la mesa hasta la parte inferior del puño (el extremo del mango). Esa distancia, en centímetros, te indica el balance de la paleta.
¿Cómo interpretar el resultado?
• 25–26 cm → Balance bajo (control, manejabilidad)
• 26,5–27,5 cm → Balance medio (equilibrio entre potencia y control)
• 28 cm o más → Balance alto (más potencia, menos control)
Dato extra: Esta medida es orientativa. Algunas marcas indican el balance en sus fichas técnicas, pero puede variar según el overgrip, protector o el uso que haya tenido la paleta.
Paletas con balance alto (hacia la cabeza)
También conocidas como “paletas cabezonas”. El peso se concentra lejos del puño. Generalmente tienen forma de diamante.
Ventajas:
• Más potencia en golpes ofensivos como remates.
• Ideal para jugadores agresivos que buscan definir los puntos.
Desventajas:
• Menor maniobrabilidad.
• Requieren buena técnica y estado físico.
• Pueden generar molestias o lesiones si no se tiene buen brazo.
Recomendadas para:
• Jugadores avanzados o con perfil ofensivo.
Paletas con balance bajo (hacia el puño)
El peso se ubica lo más cerca del agarre. Son más comunes en paletas de forma redonda o con gomas más blandas.
Ventajas:
• Muy fáciles de mover.
• Más control y precisión.
• Menor riesgo de lesiones en hombro, codo o muñeca.
Desventajas:
• Menor potencia en golpes fuertes.
• No son las mejores para definir.
Recomendadas para:
Jugadores defensivos o principiantes que buscan aprender sin forzar el cuerpo.
Paletas con balance medio (intermedio)
Equilibran peso, potencia y control. Suelen tener forma de lágrima.
Ventajas:
• Buen balance entre potencia y control.
• Mayor polivalencia en el juego.
Desventajas:
• No sobresalen en potencia ni en manejabilidad, pero ofrecen un rendimiento equilibrado.
Recomendadas para:
• Jugadores de nivel intermedio o medio/alto que buscan una paleta todo terreno.
Consejos finales para elegir bien tu paleta según el balance:
• Si estás arrancando, priorizá una paleta de balance bajo que te permita entrenar técnica sin exigir demasiado el cuerpo.
• Si jugás regularmente y querés mejorar, una de balance intermedio te va a dar control sin perder potencia.
• Si sos ofensivo, te gusta definir los puntos o jugás en la red, una paleta con balance alto puede potenciar tu juego, siempre que tengas la fuerza o experiencia necesaria.
¿Cómo elegir una pala de pádel?
Elegir la pala de pádel adecuada es crucial, sobre todo si recién empezás. Acá te damos algunos tips para encontrar la pala perfecta según tu nivel y estilo de juego.
Lo primero es identificar tu nivel. Si sos principiante, una pala de potencia puede parecer atractiva, pero suele ser difícil de controlar. Preguntate: ¿Soy más ofensivo, defensivo o equilibrado? ¿Prefiero control o potencia?
La forma de la pala influye en tu juego:
• Redonda: Ofrece más control, con un punto dulce amplio. Perfecta para principiantes o quienes priorizan precisión.
• Lágrima: Ideal para jugadores intermedios o avanzados que buscan un equilibrio entre potencia y control.
• Diamante: Para jugadores experimentados que buscan potencia. Tiene un punto dulce chico y es difícil de manejar.
El tipo de materiales influye directamente en la durabilidad, el tacto y la respuesta de la paleta:
Marco: Generalmente de carbono o fibra de vidrio. El carbono es más resistente y ligero.
Plano o cara: Puede ser de carbono, fibra de vidrio o materiales mixtos. El carbono brinda mayor potencia y durabilidad; la fibra de vidrio aporta más elasticidad y control.
Núcleo: Suele ser de goma EVA (más dura y precisa) o FOAM (más blanda, ideal para amortiguar vibraciones).
Principiantes
• Elegí una paleta redonda, liviana y con buena absorción de impactos.
• Buscá una que favorezca el control y el aprendizaje técnico.
• No es necesario invertir en materiales premium al comienzo.
Intermedios
• Optá por una paleta en forma de lágrima.
• Probá diferentes tipos de gomas (EVA o FOAM) según tu estilo.
• Empezá a priorizar la comodidad, el balance y el peso.
Avanzados
• Una paleta de diamante te dará la potencia que buscás.
• Elegí materiales de alto rendimiento como carbono 100%.
• Considerá el peso, balance y rigidez para optimizar tu juego.
Tipo de superficie: Aunque la mayoría de paletas funcionan bien en todas las canchas, si jugás en superficies más duras, buscá una que tenga buena absorción de impactos.
Peso: Las paletas livianas (340-365g) son más maniobrables; las pesadas (hasta 390g) generan más potencia, pero pueden fatigar más el brazo.
Diseño anatómico: El grip y el mango deben sentirse cómodos y bien adaptados a tu mano.
Tipos de gomas en una pala de pádel, ¿goma EVA o FOAM?
Al momento de elegir una pala de pádel, uno de los factores más importantes (y muchas veces pasados por alto) es el tipo de goma del núcleo. Este componente define cómo se comporta la pala en cada golpe: desde la potencia que genera hasta la sensación en la mano.
En esta guía, te explicamos de forma clara qué tipo de goma te conviene según tu nivel, estilo de juego y tipo de superficie.
El núcleo de la pala está compuesto principalmente por espumas técnicas que permiten absorber impactos y devolver la pelota con mayor o menor potencia/control. Las más comunes son:
Goma EVA (Etileno Vinil Acetato)
-Precisión y durabilidad
-Mayor densidad y rigidez.
-Mejor precisión en golpes técnicos.
-Larga durabilidad: mantiene su forma por más tiempo.
-Menor salida de pelota si no se aplica buena técnica.
-Nivel intermedio a avanzado.
-Jugadores que priorizan el control, la técnica y los golpes firmes.
-Ideal para superficies rápidas o jugadas en red.
-Dentro de la goma EVA existen variantes como:
-EVA Soft: más blanda, buen equilibrio entre control y potencia.
-EVA Medium o Hard: más dura, ideal para pegadores o jugadores experimentados.
Goma FOAM (Polietileno expandido)
-Goma FOAM: Potencia y comodidad
-Textura más blanda y elástica.
-Mayor salida de pelota con menor esfuerzo.
-Excelente absorción de vibraciones.
-Menor durabilidad: puede deformarse más rápido con uso intensivo.
-Principiantes y jugadores de nivel intermedio.
-Ideal para quienes buscan una pala cómoda y fácil de jugar.
-Recomendada para superficies más lentas, donde se necesita más impulso.
-Las palas con goma FOAM son muy recomendadas para personas con molestias en el codo (epicondilitis o "codo de tenista").
Elegir bien el núcleo es clave para evitar lesiones, progresar técnicamente y disfrutar más del deporte. Si estás arrancando, lo mejor es una goma FOAM que te ayude a devolver pelotas sin forzar el brazo. A medida que evolucionás, la EVA te va a dar más precisión y control en golpes estratégicos.
Escuchá a tu cuerpo: si tenés molestias musculares o articulares, optá por una goma blanda.
Pensá en el largo plazo: si jugás seguido, una pala de goma EVA va a resistir mejor el desgaste.
No te guíes solo por la estética: una buena elección técnica vale más que un diseño lindo.